En qué consiste el mantenimiento integral de una comunidad de vecinos
Los trabajos en las zonas comunes de una comunidad suelen ser fuente de conflicto entre los propietarios. Por eso a fin de evitar estos encontronazos, lo más recomendable es contratar los servicios de una empresa de mantenimientos integrales. Si en tu inmueble estáis pensando en hacerlo, os explicamos en qué consiste este tipo de tareas y por qué es aconsejable dar este paso.
No importa que sea una comunidad compuesta por muchos vecinos o por pocos, el constante uso de las instalaciones ya sean por los propios propietarios o por las visitas hacen que se deterioren y se llenen de suciedad. Por eso es más que recomendable contratar los servicios de una empresa de mantenimiento de comunidades y que esté todo en perfectas condiciones.
La apuesta por compañías de este sector aporta numerosas ventajas no solo porque cuentan con personas formadas en estas lides sino porque se adaptan a cualquier necesidad. Por ejemplo, con profesionales habrá flexibilidad horaria. Serán los vecinos, con el asesoramiento de la compañía, quienes evalúen las tareas a realizar y cuándo se deben hacer. Por otro lado, los trabajadores tendrán los recursos necesarios para evitar accidentes y estarán asegurados por la compañía contratada a fin de cubrir cualquier percance. Sin olvidar que dispondrán del material y los productos adecuados para llevar a buen fin cualquier labor.
Servicios integrales para comunidades de vecinos
Una buena empresa de mantenimiento integral lo primero que hará será analizar tus instalaciones y escuchar los trabajos que habrá que efectuar. Ya sean unas labores preventivas o correctivas, lo más lógico es hacer un “servicio a medida” ya que no todas las comunidades necesitan las mismas atenciones. A groso modo estas suelen ser algunas prestaciones más demandadas:
Evidentemente la limpieza de la comunidad es una labor indispensable. Este tipo de tarea suele incluir la limpieza del portal, de la escalera, ascensor etc. Es un trabajo que suele realizarse a primera hora y dependiendo del tamaño del inmueble se hace una vez a la semana o un par.
Tras este paso, otro de los encargos más habituales a los que hay que hacer frente son las pequeñas reparaciones o mantenimientos. Problemas con la electricidad, con las tuberías y los atascos, limpieza de canalones, mantenimiento de videoporteros, antenas de TV… las tareas pueden ser múltiples, pero lo que sí es seguro es que necesitamos de la formación y los conocimientos de personal cualificado.
Junto con las instalaciones interiores tampoco hay que descuidar las exteriores, aunque no todos las propiedades las tengan. Jardín, piscina o zonas de ocio como gimnasios deben llevar un mantenimiento para que cualquier miembro de la comunidad pueda aprovecharse de sus bondades.
Por último aunque cada vez está más en desuso, la figura del conserje todavía se mantiene en algunos inmuebles. Él puede ser la persona encargada de realizar algunas de las tareas mencionadas anteriormente con la ayuda, de manera puntual, de profesionales para trabajos más técnicos.
Si te sigue interesando saber en qué consiste el mantenimiento integral en una comunidad, ponte en contacto con nosotros. Disponemos de un amplio equipo humano para efectuar cualquier necesidad que requiera el cliente. Nos adaptamos a todas sus demandas con el único objetivo de que cuentes con unas instalaciones y zonas comunes en perfecto estado.